Lo verdaderamente apasionante de adentrarse al agua para refrescarse y divertirse, es que cada chapuzón es una experiencia completamente nueva. Cada ola cabalgada es una sensación diferente, cada tramo de aguas bravas superado nos exalta aún más, cada fondo marino descubierto mientras buceamos es un mundo aparte y así podríamos seguir con toda la carta de deportes acuáticos que existen. Además, practicándolos cuidamos de nuestra salud tanto física como mental, rodeados por lo general, de los paisajes naturales más espectaculares haciendo por ejemplo,
barranquismo en el Lago de Garda o
Kitesurf en el Lago de Garda.
1. Mejorarás tu capacidad de trabajo en equipo.
Hay infinidad de alternativas de deportes que practicar en el agua y muchos de ellos son en equipo. Ya sea en playa, río o embalses, podrás compartir con tus amigos un día de aventura y deporte rodeado de naturaleza y sin darte cuenta, tal jornada de diversión potenciará a más no poder tu capacidad para trabajar en equipo.
Te ponemos un ejemplo, practicar vela. Navegar es una experiencia sobrecogedora que envuelve todos nuestros sentidos, pero debemos recordar que estamos en la inmensidad del mar junto con más personas y para que todo vaya viento en popa, tenemos que coordinarnos al unísono con nuestros compañeros. Ya que necesitaremos de esa coordinación en cada movimiento, este deporte ayuda a mejorar la escucha y comunicación de los integrantes del equipo.
2. Compartirás con la madre naturaleza.
Sin duda, una de las cosas más enriquecedoras de hacer deportes acuáticos es que formamos parte de la naturaleza lo que implica que no solo estaremos ejercitando nuestro físico sino que también mimamos a nuestra vista con bellos paisajes. Poco a poco vamos descubriendo nuevos rincones de nuestro país y conociendo nuevas playas donde navegar, nuevos litorales que descubrir bajo el mar haciendo snorkel o buceando, o recorriendo los ríos más bravos de nuestra geografía mientras practicamos rafting o barranquismo.
Estando en contacto con la naturaleza durante horas haciendo deporte, nos aporta incontables beneficios: nos depuramos de tensiones diarias causadas por las urbes y su contaminación sónica, aumenta nuestra curiosidad, fomenta nuestra creatividad y nos ayuda a escuchar a nuestra voz interior, ya que el silencio que suele imperar en entornos naturales nos permite abstraernos con facilidad y enfocarnos en cuestiones realmente importantes para nosotros.
3. El primer paso para tener un cuerpo fit.
La lista de beneficios para nuestro cuerpo a nivel físico y mental es infinita. Si tu meta es ponerte fit, te recomendamos que pruebes un deporte acuático, cualquiera, porque además de las ventajas que ya te comentamos anteriormente te verás sorprendido cuando veas que tu cuerpo estará más tonificado y habrás ganado más fuerza, pues estaremos poniendo en uso todos los grupos musculares, que al combinar ejercicios aeróbicos nos dotan de mayor fortaleza cardiovascular.
No podrás creer la gran cantidad de calorías que quemarás, ya que al estar inmersos en agua, tenemos más resistencia y si a eso le sumamos que por lo general tenemos que usar una equipo que añade peso, y que por tanto requiere de más esfuerzo, nos veremos recompensados con un cuerpo de ensueño en poco tiempo. Por ejemplo, haciendo surf, windsurf o SUP, llegas a quemar 1000 kcal/h.
4. Aventura familiar practicando un deporte acuático
El amplio abanico de oportunidades que nos ofrecen los deportes acuáticos nos regala la posibilidad de compartirlos en familia. Si de por sí organizar un día en familia es motivo de ilusión por hacer algo juntos y diferente, los deportes en el agua hace que ese momento sea doblemente mejor. Además de disfrutar desde el más mayor hasta el más pequeño, todos sentirán que están viviendo una aventura inolvidable. No importa el deporte que sea, tanto si es un paseo en kayak, como si es una emocionante jornada surfera, la costa es grande y los son ríos largos, por lo que encontraremos tramos y rincones con lugar para todas las edades que nos permiten divertirnos sin importar el nivel. Practicando deportes acuáticos en familia, desde los más pequeños hasta los mayores, podrán regocijarse de los beneficios anteriormente mencionados mientras tenéis un día de emociones y ejercicio en el agua épico.
5. Desde lo más sereno… hasta lo más extremo
De la misma manera en la que tenemos días buenos y días no tan buenos, también habrá momentos en los que queramos practicar deportes de agua de manera relajada y otros en los que queramos aventurarnos a una jornada extrema y exaltante que eleve nuestro pulso a mil. Con las mismas cotas de diversión, podremos disfrutar de un relajante paseo en kayak por un hermoso río, como también de una intensa ruta en moto de agua por alguna de las mejores calas italianas.
Y es que el agua, como pasa con todos los elementos de la naturaleza, puede mostrarnos su lado más calmado al igual que el más salvaje. ¿A quién no le ha apetecido alguna vez navegar olvidándote de todo? Y sin embargo, esa misma persona puede tener un día de querer hacer esquí acuático sí o sí. ¿En qué día estás tú?
¿Cuándo zambullirnos al agua?
No dejes que una época determinada chafe tus días de diversión acuática. Puedes disfrutar de la playa o del río en cualquier momento del año, no obstante, si es verdad que hay unas fechas perfectas para divertirnos en el agua, aunque dependerá de tu nivel de experiencia en el deporte en cuestión y también de la localización geográfica.
Para deportes de tabla como windsurf, surf o bodyboard, si eres un principiante de mayo a septiembre podrás disfrutar de unas olas limpias, con un mar poco ajetreado y unas temperaturas agradables, pero si ya tienes experiencia, en invierno los fuertes vientos suelen generar las olas más extremas.
Si lo que buscas es bucear, te recomendamos al 100% los meses que te garanticen buen tiempo y aguas templadas para que puedas conocer el fondo marino con tranquilidad, esto suele ser en épocas estivales, aunque claro, nuevamente te decimos, todo depende de tu ubicación.
Si buscas hacer deportes en río, como kayak o rafting, la primavera o el verano resultan ideales para deleitar a tus sentidos con travesías serenas y algunos tramos de buenos rápidos y aguas bravas, pero si lo que quieres es una sensación que te de una descarga de adrenalina, estos mismos deportes en primavera e invierno son lo mejor de lo mejor.